
Como el ruido de los cráneos
Desmenuzándose en la calle
Luego del feliz impacto
Es la angustia aplastante
Como la dulzura de la piel lacerada
Por los machetes enardecidos
De los sádicos inmortales
Es el conocimiento preciso
De la distancia sideral
A la que se encuentran tus labios
Y no puedo llegar
Solo esperar
La próxima vuelta orbital
Un suplicio sin igual!...sólo el que lo ha vivido lo comprende!
ResponderBorrarUn abrazo.
El dolor y la desesperación hacen que produzcas cosas realmente hermosas. Se nota muchas pasión y eso es excelente, no sé cómo no has encontrado a esa mujer para que la deformes y la reinventes. ¿Haces declamaciones con público, en eventos?
ResponderBorrar¿Y si aumenta esa distancia sideral, o los labios desplazan su órbita?
ResponderBorrar¿Qué será de ti y de los tuyos?
Desconocimiento que nunca sabrás.
Ío